Ante el creciente número de casos de COVID-19 en la Ciudad de Buenos Aires, las condiciones de enorme precariedad del sistema sanitario son evidentes. Lxs trabajdorxs de la salud, quienes ponen el cuerpo todos los días en hospitales y salas de primeros auxilios hace semanas que vienen denunciando la falta de insumos que garanticen también su salud. En este contexto, entrevistamos a Josmar Flores, delegado independiente de la Junta Interna de ATE del Hospital Garrahan
Abriendo Caminos: Antes que nada, quisiéramos que nos cuentes un poco qué situaciones venían atravesando como comisión interna y trabajadores del hospital previo a la pandemia ¿cuál era el estado del sistema de salud en general y en particular del Garrahan cuando se desata la pandemia del coronavirus? ¿Cómo se encontraban ustedes?
Josmar: Como Junta Interna veníamos tocando varios puntos sobre el final del 2019 y principios del 2020. Como temas políticos en general las elecciones presidenciales marcaron la agenda en gran parte del tiempo donde denunciamos a lxs candidatxs principales por sus vínculos con los grandes poderes y la burguesía nacional e internacional. Advertimos sobre la necesidad de buscar alternativas que representen los intereses de lxs trabajadorxs, o sea una opción con independencia política y de clase. Luego vinieron los levantamientos en Francia, Asia y Latinoamérica. Seguíamos de cerca la rebelión en Chile, Ecuador, Colombia, Haití y el golpe de estado en Bolivia. Apoyamos esas luchas, levantamos la bandera de esos pueblos y charlábamos sobre esto en las recorridas que hacemos por los diferentes sectores con lxs compañerxs.
El sistema de salud se encontraba ya colapsado hace años por la desidia de los diferentes gobernantes. Siempre faltaron camas, enfermerxs, medicxs y demás trabajadorxs de salud. Dentro del hospital también estábamos con algunos problemas a resolver. A principios del 2020 asumió el nuevo Consejo de Administración de la gestión Fernádez-Fernández. El Macrismo se fue dejando un tendal de deudas, obras a medio construir, refacciones de maquillaje y nos dejó a lxs trabajadorxs en su gran mayoría con salarios de pobreza. En esos meses empezamos una campaña por la reincorporación de una compañera injustamente despedida y gracias a la insistencia de esta JI y al apoyo de compañerxs logramos el objetivo. Envalentonados por el logro comenzamos la campaña por la recomposición salarial ya que lxs trabajadorxs estatales perdimos más del 40% de poder adquisitivo en la era macrista. Hoy con el gobierno de Fernández no vemos un panorama mejor, la paritaria 2020 cerró el 30/05 sin ningún aumento y con una inflación que no para de subir. El ingreso de personal siempre fue y es una reivindicación que tomamos, ningúnx niñx puede ser bien atendidx sin lxs profesionales adecuadxs prestando la atención necesaria. Si hoy en Garrahan es lo que es, fue siempre gracias a sus trabajadorxs con vocación e injustamente explotados. Por eso necesitamos ser reconocidos con salarios dignos, reconocimiento profesional y con los recursos necesarios para poder atender a los más excluidxs de esta sociedad.
AC: Ya van varios meses desde que se desató la cuarentena. El gobierno de la Ciudad, en la última conferencia, reconoce un salto en la cantidad de casos, pero dice que estamos lejos de enfrentar una saturación del sistema de salud, a la par que el virus avanza sin poder ser contenido, en particular, en los barrios populares. No solo eso, sino desde el inicio de la pandemia, se conocen cada vez más casos de trabajadores de la salud contagiados ¿cuál es la realidad que atraviesan como trabajadorxs en esta etapa?
El caso de los barrios populares es aberrante, sobre todo pensando en las condiciones de hacinamiento en las que viven. A ellxs lxs conocemos bien, a los porteñxs y a los del interior, porque son nuestrxs pacientes (xadres y niñxs, entiendo a esa familia como sujeto de atención), los atendemos todos los días, lxs que viven en las villas, lxs hijxs de xadres desempleadxs, lxs que viven en pobreza extrema, lxs vemos que llegan descalzxs y con poco abrigo. En esas condiciones es lógico que va a dispararse los contagios en esos barrios. El asesinato de Ramona Medina del barrio 31 nos conmovió mucho, la última Asamblea que hicimos hace 15 días resolvió un repudio a ese crimen social responsabilizando a Alberto Fernández y a Horacio Rodríguez Larreta.
Como ustedes marcan el aumento de los casos en los barrios populares aumento de la mano de los casos nuestros, lxs trabajadorxs de la salud (15 en nuestro hospital). Era algo que sabíamos que iba a pasar desde hace meses pero no por eso íbamos a dejar que ocurriese. Como dije antes, lxs trabajadorxs de salud estamos explotadxs, tenemos dos o más trabajos para llegar a fin de mes debido a nuestros salarios de miseria. Entonces cansados física y mentalmente, malnutridxs, agotadxs, viendo cara a cara a esta pandemia, sumándole la presión de las patronales, era previsible esta situación. ¿Quién puede atender como corresponde en estas condiciones? ¿Quién cuida a los que cuidan?
AC: Desde el principio de la pandemia, trabajadores de distintos hospitales reclaman por múltiples cuestiones. Desde la falta de protocolos, insumos y elementos de protección hasta las condiciones edilicias que atraviesan. También la precarización laboral de distintos sectores, como limpieza o la que vienen denunciando desde la asamblea de residentes y concurrentes ¿qué nos podés contar de los distintos procesos de organización que se vienen desarrollando? ¿Existe alguna coordinación entre los distintos hospitales, entre comisiones internas, con la asamblea de residentes y concurrentes? ¿Qué pliego levantan hoy? ¿Tuvieron algún tipo de respuesta desde el inicio de la pandemia?
Josmar: Nosotros venimos de procesos enriquecedores como lo fue hace dos años la formación de la Interhospitalaria, nacida de la Marea Blanca protagonizada por Licenciadxs en enfermería, producción de bioimágenes e instrumentación quirúrgica. Otra gran coordinación fue la que tuvimos con compañerxs de otros hospitales de la zona oponiéndonos al 5×1 donde el Gobierno de HRL quería unificar 5 hospitales de diferentes especialidades en uno solo ¡una locura! Por suerte este último proceso fue para atrás mientras que la lucha de lxs Licenciadxs de la Interhospitalaria sigue en pie por el pase al tramo profesional de la carrera hospitalaria en CABA.
Este es un hospital con casi 5000 empleadxs de planta. Se han inaugurado nuevos sectores como el nuevo hospital oncológico, la expansión de la guardia o el nuevo vacunatorio pero el personal nunca fue a creciendo a la par. Entonces la necesidad del ingreso de trabajadorxs es una consigna que siempre llevamos adelante. Esto principalmente se nota en los turnos socialmente penosos, los turnos de noche y franquero. Los trabajadorxs tercerizadxs (Limpieza, seguridad y fluidos) son lxs más perjudicadxs salarialmente y por sus condiciones de trabajo, son monotributistas o contratadxs por migajas. El pase a planta de estxs compañerxs sería la mejor respuesta a este problema y además le ahorraría dinero al hospital pero el Consejo de Administración prioriza los intereses de las empresas.
Los residentes de nuestro hospital son parte de la Asamblea de Residentes y Concurrentes y estamos en constante diálogo con ellxs para apoyarlos en lo que necesiten y golpear más fuerte al gobierno de la Ciudad. Hemos sido cede y participado de sus asambleas, mostrando la necesidad de la unidad de las luchas como por ejemplo por la reincorporación de lxs trabajadorxs del Posadas o el apoyo a los conflictos de nuestro hospital.
Volviendo un poco a los reclamos por multilpes cuestiones, nosotrxs no somos la excepción. Desde el comienzo de la pandemia advertimos a las autoridades sobre nuestra precaria situación. A la falta de personal hay que sumarle la inicial falta de elementos de protección personal (EPP). De un día para otro lxs jefxs dejaron bajo llave barbijos, alcohol en gel, alcohol al 70%, o sea elementos básicos para evitar los contagios. Empezaron a entregarlos a cuenta gota y de calidad sospechosa, ni siquiera aún hoy hay jabón en los vestuarios del personal. Hoy estamos un poco más dotados de EPP pero aun falta muchísimo. Improvisan en la marcha, cierran y abren lugares del hospital para tratar de contener a lxs pacientxs, todo maquillaje mientras nosotrxs nos enfermamos más día a día. Tampoco se respetan los días de rotación para evitar el contagio y de esta manera somos nosotrxs mismxs vectores de contagio. Aun faltan reclamos por resolver pero por medio de la organización vamos a conquistarlos.
AC: ¿Desde su lugar como trabajadores, qué perspectiva tienen, qué plantean que es necesario hacer en este contexto? Mucho se debate sobre el levantamiento de la cuarentena, con empresarios y sectores de la derecha presionando ¿cuál respuesta le dan como trabajadores?
En los medios de comunicación instalan el debate sobre priorizar las vida o la economía, o sea el debate en torno al levantamiento de la cuarentena o no. A muchos nos parece que desvía el foco al que debemos prestar atención, la gran cirisis prepandemia. ¿Que pasara luego de que se levante el aislamiento con la Asignación Universal por Hijx, el Ingreso Familiar Extraordinario, el congelamiento de tarifas y alquileres? La crisis económica seguirá y se profundizará. Obviamente el gobierno Nacional y los provinciales querrán que la crisis la paguemos lxs trabajadorxs (aunque no lo digan abiertamente y digan que nos quieren cuidar) y no los empresarixs, banquerxs y demás fugadores de capitales. Si ni siquiera nosotrxs, lxs “héroes” aun no cobramos los miserables bonos que prometió AF estando en la primera línea en plena pandemia ¿se imaginan que pasará después? Las villas seguirán sin agua y sin cloacas. Nosotrxs como trabajadorxs de salud con salarios de miseria y explotadxs y muchxs desempleadxs. Lxs trabajadorxs despedidos (¡si! la ley antidespidos es una mentira), precarizadxs sin trabajos o con changas, todo super indigno. Mientras que las burocracias sindicales entregan nuestras condiciones de trabajos y lxs que siempre ganan seguirán haciéndolo.
Lxs trabajadorxs debemos organizarnos para reducir la propagación del virus y la tasa de contagio, esto es mediante la entrega y utilización de los EPP de calidad y cantidad necesarias, exigimos testeos al personal de salud y la implementación de protocolos de prevención. Lógicamente que el aumento salarial e igual a la canasta familiar para lxs que menos ganan y la mejora en las condiciones de trabajo son de vital importancia. Para esto necesitamos un impuesto a las grandes riquezas, el no pago de la deuda usurera y que ese dinero vaya a salud, educación y ciencia (otro sector olvidado pero que hoy todxs reivindican).