En sintonía con la situación general, La Matanza batió un nuevo récord la semana pasada: 1000 infectadxs de coronavirus en un día, concentrando así casi el 14% del total de positivos de la provincia de Buenos Aires. Los preocupantes datos de la pandemia son la punta del iceberg de una situación económica, social y sanitaria que requieren tanto medidas urgentes como cambios estructurales para que las grandes mayorías puedan conquistar una vida digna.

El partido de la Matanza concentra una población de 2.5 millones de habitantes, siendo el más populoso de la Provincia de Buenos Aires. Se dice que en un territorio y población similar a la de CABA que se gestiona…con la mitad de su presupuesto. En este sentido, las condiciones de pobreza y precarización de la vida de lxs matanceros es una constante. Asi lo demuestran las 114 villas y asentamientos, y los preocupantes índices de desocupación que ronda el 15% y el 40% de personas en situación de pobreza.

En este marco, la pandemia del COVID-19 en la Matanza vino a desnudar una realidad alarmante y a demostrar la insuficiencia de recursos para hacer frente a la pandemia, 8 hospitales públicos con 394 camas de cuidados intensivos y 2056 de cuidados generales, indican el desfinanciamiento acumulado en años en la salud pública del distrito.

El reciente anuncio de una ampliación de las camas de terapia intensiva en un 46% y en un 38% de camas de internación general son apenas un alivio que no logra ir al fondo del problema.

Uno de los ejes centrales de la problemática sanitaria de la Matanza tiene que ver con el desconocimiento y la falta de dialogo del Municipio para con lxs trabajadores de la salud del distrito. La situación es grave ya que el promedio del salario de lxs trabajadores de la salud no alcanza a cubrir la canasta básica, las remuneraciones sin aportes representan un 40% del salario, la precarización laboral es la norma con contratos temporarios y cotidianamente dan la pelea para poder acceder a los equipos de protección personal necesarios en el marco de la pandemia.

A su vez una de las principales denuncias de lxs trabajadorxs de la salud en este contexto es la falta de trabajadorxs para atender la altísima demanda en los establecimientos de la salud, lo que requiere una respuesta inmediata por parte del Municipio disponiendo recursos para contrataciones acordes y con salarios dignos de un mayor número de trabajadores de la salud. Esto se ha visibilizado en los últimos días con los testimonios de trabajadorxs colapsados por la situación en los hospitales de la Matanza, como lo expresaba la Directora del Hospital Balestrini: “Realmente se pusieron la pandemia al hombro, se recargan de trabajo para evitar que se cierre algún sector, llevan consigo la incertidumbre de luchar contra una enfermedad desconocida, se enfrentan todos los días al dolor, a la muerte y al miedo de llevar el virus a la casa” (Telám 29/08/20).

Por otro lado, la situación económica y social no es muy distinta a la emergencia sanitaria que se vive en el distrito. Mientras el intendente Espinoza se encuentra ocupado en el armado y presentación del Consejo de Seguridad Municipal y en la habilitación de las más de 2000 industrias que en el distrito ya se encuentran en funcionamiento, la situación de lxs trabajadorxs es alarmante, como así lo demuestran los despidos en Acindar, el conflicto de lxs trabajadores de La Nirva que frente al vaciamiento se están haciendo cargo de la fábrica, las denuncias de un importante número de contagios entre los choferes de las líneas “Almafuerte” y “Transporte Ideal San Justo”, entre otras.

En este cuadro es necesario visibilizar las fuertes denuncias de amenazas, presiones y torturas por parte de la cadena COTO a lxs trabajadores. Difundido como el caso de “Christian” quien era grupo de riesgo, su esposa había fallecido por COVID-19 y lo obligaron a ir a trabajar igual y continuar en la misma sucursal bajo amenazas, se multiplican las denuncias a la secretaria de DDHH ya que como señala el delegado Héctor Castro “Christian es un solo caso pero hay millones de casos en la cadena COTO” (Infogremiales, 28/08/2020). Como contracara Alfredo Coto tiene una fortuna de US$ 870 millones y se encuentra en el número 13 del ranking Forbes de los 50 argentinos más ricos.

Así también lxs trabajadorxs municipales hacen escuchar su voz con una semana de protestas virtuales impulsadas por las agrupaciones opositoras a la conducción del STMLM con un fuerte impacto. En este sentido señalo Ruben Bustos dirigente de la agrupación Almafuerte: “Estamos muy conformes por la recepción que tuvo la medida, y esto nos da la fortaleza para poder reafirmar los pedidos de 40.000 pesos de sueldo mínimo en mano, sin descuentos; el pase a planta de contratados; reivindicar a nuestros jubilados, que hace 18 meses que tienen el mismo sueldo y nuestra caja está detenida; y salubridad para aquellos compañeros que les toca trabajar en esta pandemia” y aseguró que la medida continuara.

La situación ambiental también es un eje de relevancia para un distrito que hace años viene dando peleas importantes: el reclamo que lleva más de 11 años del cese de la contaminación que la fábrica Sika-Klaukol genera en el aire que respiran lxs trabajadores que viven en el barrio se pone en agenda con un nuevo acampe y movilización; el cuidado de la reserva natural de La Ferrere, el saneamiento de la Cuenca Matanza Riachuelo son temas que preocupan a lxs vecinxs quienes se organizan para luchar por otras condiciones de vida.

Por otro lado, en lo que respecta a la agenda feminista la creación de la Secretaría de Mujeres, Políticas de Género y Diversidades es sin lugar a duda progresiva, Tiene por delante la tarea de fortalecer las políticas de género, así como algunas sanitarias como la garantía de las ILE y los consultorios de terapia de modificación corporal para personas trans, lo que será un desafio del movimiento feminista de empujar el cumplimiento de dichas demandas.

Esta situación muestra un cuadro convulsionado en la Matanza, como lo demuestran las ollas populares que se multiplican en una cuarentena completamente flexibilizada por las presiones patronales pero también por la necesidad de amplios sectores populares que viven de changas y no encuentran otra respuesta por parte del gobierno de Espinoza. El fallecimiento del cura villero “Bachi” -un referente de la VIlla Palito en San Justo- es una noticia que ejemplifica como golpea la pandemia en los sectores populares.

Es preciso entonces, unificar las diversas luchas en el distrito y comenzar desde abajo a construir una alternativa que pueda responder a los intereses de las amplias mayorías de la Matanza, con las organizaciones populares como protagonistas en la construcción de una agenda de salida a la crisis social, económica y sanitaria que vive el distrito en donde paguen los que más tienen.

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