Mientras que en CABA, con el aval del Ministro de Educación Nicolas Trotta, las clases comienzan el 17 de febrero de manera presencial, en la Provincia de Buenos Aires el gobierno se plantea comenzar el 1 de marzo. Con una bimodalidad escalonada con pocas precisiones aún, la comunidad educativa bonaerense debe intervenir en la discusión.
La educación que Vidal nos dejó y la pandemia empeoró
A ambos lados del Riachuelo y de la General Paz las escuelas están destruidas hace años. En la Provincia de Buenos Aires los 4 años de Vidal dejaron al sistema educativo en un duro estado de crisis. La infraestructura está muy deteriorada, al nivel que hay cientos de escuelas que no tienen gas natural o agua potable, y con mayor gravedad en los distritos más pobres del Conurbano. Recordemos aquella explosión en la escuela de Moreno, en 2018, que cobró la vida de Sandra y Rubén como el ejemplo más vivo que retrata el estado de situación de la escuela pública bonaerense.
En la modalidad virtual durante el ciclo lectivo 2020 el gobierno nacional ha tomado medidas como el DNU que declara la telefonía celular, internet y cable; y la tarifa social de las mismas; la creación de la plataforma de soporte educativo Juana Manso y se han otorgado cursos gratuitos en el INFOD, entre otras. Además del plan ATR y su continuidad presencial con el plan FORTE para el fortalecimiento de las trayectorias educativas.
Sin embargo, estas medidas fueron insuficientes y la pandemia agudizó la emergencia educativa que vivimos durante el gobierno de Maria Eugenia Vidal. El Gobierno de Axel Kicillof de forma tardía en el mes de Septiembre tuvo que poner en marcha el plan ATR, ya que 1 de cada 10 estudiantes habían perdido contacto con las instituciones educativas. En esta situación únicamente se contabilizan aquellos estudiantes que no tuvieron ningún tipo de vínculo con las instituciones educativas, las cifras se elevan a niveles inimaginables si se contabiliza aquellos que únicamente han recibido tareas vía whatsapp y con una frecuencia en muchos casos quincenal.
No obstante, las dificultades de la educación virtual no estuvieron únicamente en los estudiantes. El resultado preliminar de la Evaluación Nacional del Proceso de Continuidad Pedagógica del Ministerio de Educación Nacional afirmó que el 79% de los equipos directivos y docentes tenían limitaciones de conectividad y el 66% problemas de equipamiento. Sin contar las falencias en la oferta de formación docentes sobre usos y apropiaciones de las nuevas tecnologías.
Desde los medios de comunicación, las patronales y la derecha se ejerció una notable presión para que se vuelvan a las clases presenciales. Es así como en CABA, Horacio Rodriguez Larreta y Soledad Acuña dieron comienzo al ciclo lectivo en las aulas el 17 de Febrero sin protocolos claros, ni un proceso de debate con la comunidad educativa. Pero si hay algo que nos quedó claro este 2020 es que la educación pública se sostiene gracias a su comunidad educativa. A esxs docentes que se enfrentaron a lo desconocido, a esas familias que se vieron en una situación inédita en sus casas, a lxs estudiantes que enfrentaron sus estudios en la virtualidad y con mayores condiciones de aislamiento, a todxs aquellos que sostuvimos la educación ante un Estado que dio respuestas insuficientes. Es por eso, que somos nosotrxs quienes en cada escuela y cada debate público debemos exigir nuestras condiciones para la vuelta a clases este 1 de Marzo.
Desde Abriendo Caminos planteamos la necesidad de exigir plena conectividad y dispositivos para toda la comunidad educativa, condiciones dignas para nuestros docentes y auxiliares; y la modalidad presencial con escuelas seguras para fortalecer lo que no se pudo desde la virtualidad.
De ese modo, exigimos que se garanticen las condiciones de infraestructura e higiene, el transporte para evitar los riesgos en la circulación del virus y plan de vacunación para toda la comunidad educativa. La modalidad presencial no se puede plantear de forma plena por los riesgos sanitarios que esto implicaría y debe modificarse si hay un cambio en la situación epidemiológica. Es por ello que la educación virtual aún continuará y tenemos que seguir exigiendo conectividad y dispositivos para toda la comunidad educativa.
Es indiscutible que las condiciones laborales de auxiliares y docentes deben mejorar. Resulta preocupante que, mientras se impulsa la vuelta a la presencialidad, los distintos gobiernos no hayan abierto la paritaria docente (recién la paritaria nacional sin incidencia directa en muchos distritos será el 18 de febrero).
También es necesario que el Estado garantice el cumplimiento de protocolos y condiciones laborales de las instituciones privadas, quienes desde una perspectiva mercantil de la educación más presión ejercen por la presencialidad, pero menos condiciones sanitarias y laborales ofrecen a sus trabajadores.
Desde Abriendo Caminos consideramos necesario que en nuestro Centros de Estudiantes y sindicatos sigamos luchando para exigir escuelas seguras, conectividad y condiciones dignas de trabajo. Es necesario formar parte del debate en curso y de cara al 1 de Marzo bregar para que esto sea una realidad. A la vez, emprendemos la solidaridad y abonamos a que nuestros espacios acompañen la lucha por la defensa de la educación pública. Es por ello, que emprendemos colectas de materiales de estudio, dispositivos tecnológicos e insumos de higiene, y ponemos a disposición nuestros espacios sociales y culturales como espacios de conectividad y apoyo escolar con los protocolos necesarios. Además nos ponemos en estado de alerta ante las paritarias que se avecinan y el incumplimiento de las condiciones en nuestras escuelas.
El Covid-19 nos trajo una situación inédita y la educación no fue la excepción, sin embargo en este contexto bregamos por que la alternativa pedagógica no haga distinción y llegue a todxs. Porque la educación pública siga siendo un pilar y principalmente apoyándonos en quienes las construyen, nosotrxs, la comunidad educativa.